Unid@spodemos y la autocrítica, ante todo deciros que sois la única esperanza de dignidad política que me queda.

Hay que hacer autocrítica, es básica y necesaria.
Es evidente que ha habido muchos factores que han incidido negativamente en la campaña: Venezuela, el PSOE y su argumento que Podemos tenía que gobernar con ciutadan,s, para un gobierno del cambio, surrealista pero siguen y siguen. Zapatero te quiero, que guapo eres Dorian Grey, por lo feo...lo de la cal viva me parece perfecto, la realidad que se niega o esconde nos lleva donde nos lleva, una sociedad de falsarios y mentirosos pero para mí, lo  peor, negar el comunismo, si hay una alianza se asume con todas las consequencias. No podemos negar que la palabra comunismo asusta, eso de repartir la riqueza ya no se lleva...lo malo es que en su momento tampoco repartian la riqueza ni la libertad.
Nos convertimos en los malos, en este país la clase trabajadora y honesta son los malos. Los votantes así lo han manifestado. No quieren gente decente en el gobierno, los quieren indecentes.

Brexit y referendum de Catalunya, que casualidad y en que curiosas circunstancias se han unido para aumentar la incertidumbre y el desconcierto, pero Pablo, y que conste que te respeto, admiro y apoyo, ha habido momentos que, quizas por exceso de confianza en las encuestas, en los resultados, dejaste de pisar tierra firme y te dejaste llevar por la ilusión de que podrías llegar a ser el próximo presidente de este país, que ojala,  y entre tod@s Unid@spodemos dar rumbo a la dignidad en  la política de este país despojándote de lo más necesario, la humildad. Este especto fundamental ha mucha gente le ha hecho dar un paso atrás, lo malo que no ha sido uno sino millones y ante la realidad de las urnas a pesar de lo injusto de la ley electoral, los resultados han sido que la gente de peor calaña, de peor catadura moral, ladrones con título superior, se creen que su mierda se ha perfumado y que ya no huele.

No ha podido ser, y no sabes cuanto me duele, otra vez la gente trabajadora y honesta ha quedado bloqueada por la desfachatez, la caradura y la corrupción y, quizás,  tal vez Monedero tenga algo de razón, ante semejantes personajes la ingenuidad e inocencia que suelen acompañar a la gente decente nada tiene que hacer, si toda la gente ingenúa, inocente y decente no se une de una puñetera vez, y conseguir que el pueblo unido jamás sea vencido.
Muchos chistes acerca de lo que ha elegido la mayoria(mentirosa y falseada) circulan pero de sonrisa ninguna, amargura por la realidad tan patética de país y ciudadanía que muestran.