No se me ocurre nada más, ante una política que desde un extremo al otro han convirtiendo en zona libre para la corrupción.
Corruptos, ladrones, liberar violadores... la consigna.
Se podría aplicar a todo el espectro político.
Qué es una mujer, preguntan a Irene Montero. Esto habría que preguntárselo al patriarcado castrador, castrado mentalmente.