Padre, madre. Se acaba el amor, empieza la pesadilla. Ambos son responsables y como quieren a sus hij@s, no quieren separarse de ell@s, se debería suponer que harán todo lo mejor, todo lo posible e imposible para contemporizar y que la separación sea lo menos traumática. Cosa difícil, bien difícil cuando los sentimientos se desbordan, por un lado, y por el otro.
Triste muy triste la situación.
La justicia, imposible, escribir nada más. Excepto, la justicia.