La política de pactos en esta España camisa blanca sin esperanza, cristalina. Todos metiendo mano en el tarro del esfuerzo de la gente trabajadora y honesta. Un@s incompetentes que no quieren soltar las monedas que tienen agarradas en su mano, una y otra vez, de forma asquerosamente desoladora.

 Todo menos generosa, altruista, solidaria, decente y honesta: la política en este país camisa blanca sin esperanza de decencia y honestidad. 

Y l@s que van de chul@s, los peores, derecha nacionalista republicana, camisa blanca. Dan yuyu.

Celebración, celebraciones de nacimientos y muertes. Que mal, pero que mal está la cosa. Este pobre y triste país por que, entre un@s y otr@s, pobre España Camisa Blanca.

 Lo evidente, la triste historia, está tan clara que a todos nos debería doler el alma.

Ana Belén, España camisa blanca...nuestra pobre España que debería ser más respetada y menos odiada.

Más respetada quiere decir no apropiársela; y menos odiada por los que se apropian, hacen lo mismo con otra camisa blanca.