por el triunfo de una escuela pública, digna, de calidad, no a la privatización y al liberalismo encubierto que poco a poco de una manera sutil nos van imponiendo. No a unas direcciones de centro basadas en los objetivos que no son otra cosa que un servilismo encubierto y a la larga favoritismos y amiguismos de clase corrupta. No a los nombramientos telemáticos, opacos, poco fiables, sospechos. Por las nuevas generaciones de hombres y mujeres que creen en la escuela pública, menudo panorama vamos a dejarles.
Quieren, que como ellos son un@s corruptos e incompetentes, nosotros también lo seamos. El último reducto de dignidad hacia nuestro pasado sólo se encuentra en este profesorado magnífico, que se esfuerza y trabaja a pesar del deteriodo impuesto por un sistema que se plega delante de los poderosos, a favor del pueblo. En defensa de esta juventud que poco a poco van degradando, eso si con rimbombantes palabras, competencias. Sí, sois tod@s incompetentes clase política. Dimitid, no os aferréis a la silla, a la poltrona, eso os degrada y muestra vuestra catadura moral. De cada vez la cara se os pone más dura.
Dinero para las escuelas religiosas.
hola, cuando empecé a leer tu post, me pareció estar viendo reflejada la realidad de la educación en la argentina. Comparto con vos absolutamente todos los conceptos.
ResponderEliminarUn gusto y hasta pronto.
Gracias, un país que no defiende su escuela pública está condenado al fracaso. Saludos.
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