Hace algunos días leía el artículo de Elvira Lindo respecto al comentario despreciativo que habían hecho respecto al grupo mujeres que se habían manifestado a favor de una ley de plazos para el aborto. Pocas y viejas, yo me pregunto donde estaban las jóvenes, es que ellas no abortan? El sábado en un articulo sobre las elecciones americanas el comentarista respecto a las votantes de Hillary Rodham, decía que la votaban las mujeres viejas y los republicanos jovenes y viejos blancos. Lo que está claro es que estos comentarios destilan una misoginia ancestral... Esta claro que una mujer con carácter e independiente, que en su vida personal y política ha cometido aciertos y errores, con experiencia y capacidad para dirigir una nación como Hillary Rodham está siendo ninguneada, despreciada (constantemente se introducen comentarios peyorativos hacia su persona)frente a un hombre que promete que va a transformar América, con unos discursos totalmente artificiales, preparados, con un cierto aire mesiánico al que parece siguen los jóvenes de ambos sexos y yo me pregunto que pasará cuando Barack H. Obama llegue al poder. ¿Acabará con la pena de muerte, las injusticias, el racismo, la persecución a los inmigrantes, con los golpes militares en otros países, con la corrupción, con los lobbyes? Si es así, mis respetos.
Qué pasa con las mujeres jovenes que no reconocen el esfuerzo hecho por las mujeres de las generaciones anteriores y no les dan su confianza? Los hombres siempre han ejercido el poder, sean del continente que sean, y la muestra es un mundo de asesinatos, muertos, corrupción, masacres, genocidios y un sin acabar de injusticias... y no digamos de la situación de las mujeres en gran parte del nuestro planeta gracias a las leyes odiosas impuestas por los hombres.
Defiendo que las mujeres puedan demostrar que saben hacer las cosas diferentes. Por descontado que la libertad femenina lleva a algunas a actuar igual que lo hacen los hombres en el poder. Bueno, la libertad conlleva la decisión de cada un@ a tomar el camino de acuerdo con sus principios y sus deseos. Creo que en algún momento también podremos decir, eso no nos gusta vamos a cambiarlo.
No me vale lo que se suele decir da igual hombre o mujer, el más competente. La política, por desgracia, no sigue ni de lejos este principio. Mujeres androcéntricas y machista las hay en todo el mundo, demos paso a aquellas que parten desde principios de libertad, de solidaridad, y con el deseo, también de transformar el mundo, que está visto no gusta a nadie.
Hay una parte de la sociedad que siguen proyectando mujeres que sólo sean sexo, mujeres perversas, manipuladoras, ambiciosas, que sean las culpables de todos sus problemas, así nunca tendrán que asumir la miseria en el que su basa su poder. Eso le está pasando a Hillary, todo el mundo se permite criticarla, hacer comentarios desagradables, empequeñecerla, todo por no reconocer que da vueltas a muchos hombres que están en el poder por todo el mundo y que más valdría que se hubiesen quedado en sus casas.
